Yo no fui
Autores: Juan Fernández y Hernán Scinica
Palabras clave:
Síntesis:
El capítulo comienza con dos hombres corriendo a la par y conversando sobre sus vidas. Uno de ellos reduce el paso y objeta que es porque no durmió bien la noche anterior. Éste se detiene y su amigo le pregunta cómo esta con Elyse, a lo que él responde: “genial”. Al contestar con un monosílabo, su amigo no le cree e insiste con la pregunta, y el interrogado responde que tienen problemas pero que siempre se resuelven porque alguno de los dos pide disculpas. El amigo sigue con el cuestionario y esta vez le pregunta con qué frecuencia hacen el amor, el muchacho contesta a menudo y el otro le cuestiona: “¿esta mañana?”, como no obtiene ninguna respuesta por parte de su amigo le dice: “hiciste el amor esta mañana, ¿por eso no puedes levantarte?, vamos” y lo incita a pararse.
En la siguiente escena, el muchacho que había sido interrogado por su amigo, abre la puerta de lo que parecería ser una casa, ya que la primera imagen que se ve es la de una cocina, mientras entra grita: “Elyse”. Abre la heladera, busca algo que no encuentra, y exclama: “cariño, estoy deshidratado, ¿tenemos algo con electrolitos?”. Camina dirigiéndose hacia otro lugar de la casa, abre una puerta y dice: “Despierta, bella durmiente” mientras se acerca a una cama en la que se encuentra acostada una mujer. La incita a levantarse usando la excusa de que el refrigerador está vacío, y abre las persianas mientras le dice: “anda, son casi las 4:00”. Se sienta al lado de la cama, y empieza a llamarla reiteradas veces al ver que la mujer, Elyse, no responde. La mujer sin abrir sus ojos le pide al hombre que llame a Jacques porque se siente mal. El muchacho le responde: “es sábado, hace tres días que no vas a trabajar ¿recuerdas?” y se acerca a ella. Elyse objeta que quiere dormir y el hombre mientras la acaricia le responde: “no te has levantado de la cama desde el miércoles”, ella sigue objetando que la deje en paz, y él sigue insistiendo, a lo que la mujer bruscamente se da vuelta y le pega una cachetada mientras le grita: “¡Te dije que me dejes en paz!”. Ambos quedan perplejos y ella se incorpora levantando su torso de la cama, y diciendo anonadada que cree que algo le está pasando. Se corta la escena y comienza la presentación de la serie.
En la tercera escena se ve a Cameron, una doctora de la clínica, con una carpeta en mano contándole al Doctor House que una paciente duerme 18 horas al día desde que ingresó a tal lugar. El médico le dice que es depresión clínica y la médica refuta esta hipótesis, a lo que su compañero la felicita por haber resuelto el caso y expresa que no lo necesita mientras se retira. Ella parece no estar conforme con tal respuesta por lo que lo sigue y le comenta que necesitan saber que tiene. Se detienen frente a un ascensor, ambos suben en él. La médica continúa explicándole sobre el misterio del caso. El ascensor se detiene, abre sus puertas, ambos salen, luego se detienen, se ubican frente a frente e intercambian algunas palabras en las que el doctor le pregunta el por qué, los motivos que tiene ella por esa paciente, qué es lo que le interesa. Ella se queda mirándolo, él le pide la ficha clínica (la carpeta que posee en su mano), ella le pregunta el por qué y él le contesta que su interés le interesa y se retira.
En la escena que sigue vemos a Elyse en una cama del hospital y al hombre del comienzo que está a su lado, acariciándola. Esta escena se corta e interrumpe otra (quinta escena) en la que vemos una charla entre varios doctores sobre la paciente que se encuentra irritable y duerme 18 horas al día. Discuten entre ellos sobre la posible enfermedad que porta la mujer, que para alguno de ellos es tan sólo depresión clínica, pero diagnóstico con el cual House no está de acuerdo. La discusión sigue. Además del potente sueño, la paciente presenta un índice de sedimentación elevado e hipersomnia y cambios de personalidad que apuntan al cerebro. House considera que la paciente tiene un tumor y pide que le repitan los análisis de sangre y hagan una resonancia con cortes de dos milímetros a través del mesodiencéfalo. Se corta la escena.
En la escena seis vemos una mujer en bata sentada sobre una camilla y a House sentado enfrente de él, en una silla haciéndole preguntas relacionadas con su malestar. El comienza a controlarla mientras continúa con el cuestionario. Cuando termina de escucharla, se corre y le dice que probablemente sólo esté anémica y que hará un ECG para estar seguro. La muchacha baja su bata mientras él cierra las cortinas y al voltear la vista se la queda mirando hasta que interrumpe exclamando “Santo Dios. ¿Son reales?”, ella contesta que se las regaló a su esposo cuando cumplió 40. Luego de esa respuesta, el médico le dice que cree tener la causa del problema en su cara, pero que necesita consultar con un colega. Llama por teléfono al Dr. Wilson. La escena termina.
En la siguiente escena, escena siete, se retoma la escena cuatro. El hombre que antes acariciaba a Elyse, ahora está sentado junto a su cama en el hospital. La escena comienza con el muchacho preguntando: “¿un tumor?”, y un médico que le responde: “no sabemos, vamos a revisar para estar seguros”, a lo que el muchacho objeta: “ya lo hicieron”. A esta objeción el médico le dice que la resonancia anterior era más general y la médica que se encontraba a su lado le explica al familiar del paciente que es imposible ver unos tumores a menos que se sepa dónde buscar. Elyse se encuentra llorando, y el muchacho a su lado dándole ánimo mientras la acaricia. La escena termina.
En la escena ocho vemos como una médica prepara a Elyse para ser sometida a la resonancia.
La escena nueve retoma la escena seis. Vemos a la mujer acomodándose la bata mientras dos médicos, el Dr. Wilson y el Dr. House, salen del consultorio hablando de sus senos. Discuten entre ellos sobre el por qué la muchacha se sometió a tal cirugía. Wilson quiere quitarle importancia al hecho, pero House parece no estar de acuerdo refutando que ella no lo hizo por su esposo, sino por ella, y explicita que es la misma razón por la que él usa esa corbata, haciendo una elección de las mismas para cada día, porque se quiere ver guapo. Aparece una mujer que cuestiona por qué se necesitó de dos jefes de departamento para tratar a una paciente con falta de aliento, y pregunta si las complicaciones aumentan con el tamaño de la copa de manera irónica. House contesta pidiendo una serie de estudios, y la mujer le responde que lo hace para encubrir su lascivia. La mujer se retira y termina la escena.
En la escena diez se retoma nuevamente el caso de Elyse. En la primera imagen vemos a uno de los doctores informándole tanto a ella como al esposo, que no pudieron apreciar lesiones en la resonancia realizada, y que aún no saben qué es lo que le causa los problemas neurológicos. El muchacho se levanta de su silla y cuestiona a los médicos por tardar tanto en encontrar la enfermedad de su acompañante. La conversación es interrumpida por Elyse cuando manifiesta que se siente mal y comienza a tener convulsiones. Los médicos que estaban en la habitación piden ayuda e intentan reanimarla, hacerla salir de tal estado. La escena termina y comienza otra en la que se ve al médico sentado al lado de Elyse observando cómo ésta copia unas imágenes. Vemos en esta escena las dificultades que tiene ella en motricidad. La escena se corta.
En la siguiente escena vemos nuevamente una reunión entre los médicos que discuten sobre la posible enfermedad de Elyse. Uno de ellos objeta que no es un tumor lo que tiene, y otro agrega que podría ser un pequeño glioma que se encuentra oculto y que deberían hacer una nueva tomografía. Los médicos reunidos intercambian palabras y descartan posibles enfermedades debido a los síntomas que la paciente posee. Uno de los médicos considera que podría tener cáncer de mama, y ésta enfermedad no es descartada, ya que la misma había matado a su madre. House se retira.
En la escena siguiente vemos como se le informa al acompañante de Elyse que la mujer tiene cáncer. El muchacho parece no entender y formula varias preguntas que son contestadas por los médicos.
Luego vemos como a Elyse se le realizan los estudios pertinentes para lograr detectar el foco de la enfermedad. Mientras le realizan los estudios, la mujer le cuenta a la médica que su madre murió a su misma edad.
Al estar los resultados del estudio, los médicos se reúnen y discuten sobre estos. No hay tumor pero Wilson dice que hay casos en los que no existe tumor, y agrega que esta enfermedad con estas características es intratable. House dice que hay que dejarse de preocupar por encontrar el tumor y empezar a tratar los síntomas, que el tumor crecerá y así será más fácil de encontrar. Además agrega que hay que revisar su lugar de trabajo ya que el esposo no está enfermo y si es reacción a algún tipo de toxina no se encuentra en su casa. Dr. House delega este trabajo a Foreman.
En la escena que sigue aparecen Dr. House y Foreman discutiendo. La escena culmina y empieza otra en la que aparece Foreman en la cocina donde Elyse trabajaba, siguiendo a uno de los tantos cocineros que se encuentran en ella, mientras le realiza un interrogatorio. El cocinero dice que no hay bichos en su cocina, que no utilizan químicos para limpiar, y que hace 15 años que utilizan el mismo detergente y nadie se ha enfermado. En la próxima escena se muestra una conversación que tienen la paciente, Elyse, y una de las médicas. Elyse pregunta por Ed, quien ha estado acompañándola todo este tiempo, y le pregunta a la doctora si ella está casada, a lo que recibe una respuesta negativa. Elyse le cuenta a la médica su historia con Ed, como se conocieron. Cuando termina la historia, Elyse comenta que le duele el cuello, la doctora la acomoda, le dice que van a realizar la misma prueba que el día anterior, y le pregunta si recuerda que día es. Elyse no logra responder, se queja por una fuerte comezón en el brazo y comienza a rascarse. Mientras la doctora insiste con la prueba para saber si la mujer sabe qué día es, ésta no interrumpe su acción de rascarse. Cuando la doctora va a buscarle una crema para calmarle la picazón, vemos como se hincha el brazo de Elyse, y como por esa bola formada comienzan a salir bichos. Elyse se desespera, comienza a gritar pidiendo ayuda, y se rasca con mucha brusquedad. La doctora vuelve e intenta tranquilizarla, pero no lo consigue. Aparece en escena Foreman que intenta ayudar a la doctora. Elyse no logra calmarse, por lo que deciden inyectarle cinco miligramos de haldol. Entra Ed en escena junto a otra doctora. En el final de la escena la vemos a Elyse rodeada de doctores intentando calmarla, y a Ed a su lado.
Comienza una nueva escena en la que vemos una discusión nuevamente entre Foreman, que optó sedar a Elyse, una paciente que duerme 18 horas al día, con Dr. House, que no está de acuerdo con tal decisión.
Luego vemos una nueva reunión de médicos en la que discuten las posibles enfermedades y descartan la que consideraban poseía al contar la paciente con nuevos síntomas que entran en contradicción con la enfermedad diagnosticada. Dr. House dice que quizás la paciente sí posee bichos debajo de su piel, y argumenta que en la etapa final de la tripanosomiasis africana casi todos los parásitos se alojan en el cerebro. Foreman considera imposible esta idea, ya que Elyse nunca ha viajado a África, pero House parece convencido y lo refuta diciendo que los síntomas que la paciente tiene concuerdan con los de dicha enfermedad. Wilson aclara que también es posible adquirir la enfermedad tras una transfusión, pero la doctora expresa que Elyse nunca ha recibido una. Wilson le pregunta a Foreman por el tema de las toxinas, y éste informa que la cocina estaba muy limpia, pero que cocinan conejo, que la paciente podría tener la fiebre de los conejos, ya que sus síntomas concuerdan con tal. Cree que picar la carne podría dispersar fácilmente la bacteria que podría haber sido inhalada, pero esto le hubiese causado problemas respiratorios, por lo que después de volver a discutir con House, Foreman y el equipo comenzaron a investigar para ver si lograban descubrir dicha enfermedad en la mujer.
Al no saber qué enfermedad presenta Elyse consideran tratar ambas enfermedades, empezando por el tratamiento más seguro.
En la escena que sigue vemos a Wilson hablando con House, sobre los supuestos amoríos que House cree que su compañero tiene. Wilson después de un largo interrogatorio que le hace Dr. House acepta que almorzó con una de las enfermeras porque quería ser amable. La charla es interrumpida por la misma mujer que los había cuestionado en la escena 9 por estar implicados en un caso de una paciente con falta de aliento dos jefes de departamento. Ella trae los resultados de los estudios y dice que los considera normales, pero Dr. House le pregunta si revisó los resultados de ECG y pone de manifiesto que él tenía razón.
En la escena que sigue aparece House abriendo una puerta y entrando a una habitación en donde se encontraba la paciente con falta de aliento, y le comenta que se ECG muestra una disminución del ritmo cardiaco. Dr. House le hace una serie de preguntas, entre ellas si su esposo tiene presión alta. Él cree que el esposo de la muchacha mezcla un poco de su medicamento con el azúcar moscabado porque no quiere hacer el amor con ella, y los betabloqueantes que toma provocan disminución de la libido. Dr. House se retira después de un intercambio de palabras con la paciente que le cuestiona qué hacer.
En esta escena se vuelve a la historia de Elyse, Cameron, Foreman y Chase obtienen los resultados del estudio de ella, los cuales no eran los esperados. Entra Dr. House a la escena y esboza su teoría sobre como contrajo la enfermedad Elyse, por vía sexual, es decir, engañando al esposo. Cameron dice que eso es imposible ya que ambos se aman. Tras la ingenuidad de la doctora, House manda a Foreman y a Chase a preguntarles al esposo y a la esposa, respectivamente, si le fueron infieles el uno al otro. Cameron “enfrenta” a House, le pregunta porque no confía de como hace su trabajo y le dice que es por eso que no la mando a ella a hacer esas averiguaciones.
Con respecto al diagnóstico siguen estando entre dos enfermedades (la enfermedad del conejo y la del sueño), asique ambos médicos (Chase y Foreman) les preguntan a Ed y a Elyse por los síntomas específicos de cada una de ellas. Como por los síntomas sobre la enfermedad del conejo obtuvieron respuestas negativas, le preguntan sobre los síntomas de la enfermedad del sueño. Les preguntan si uno le fue infiel al otro, ambos dicen que no. Foreman le explica al esposo que, de mentir, le podría provocar la muerte a la esposa, ya que la enfermedad del sueño es fatal.
Descartado el engaño, Dr. House indica medicar con determinada droga a Elyse. Ella está en la habitación, pregunta por el esposo (que está durmiendo en una silla en la habitación), Cameron está controlándola, la enferma le pregunta dos veces, en el lapso de un minuto, si es muy tarde (no lo recordaba). Cameron pone cara de soprendida y preocupada, Elyse se queda dormida en la mitad de una frase, la médica la sacude para despertarla y por el ruido se despierta el esposo. El pulso de Elyse esta bien, la respiración también, las pupilas estaban activas, pero no reacciona al dolor, la enfermera determina que está en coma.
Están House, Chase, Foreman y Cameron debatiendo sobre cómo puede ser que haya entrado en coma si estaba siendo medicada. House como sigue sosteniendo que alguno de los dos le fue infiel al otro, cree que en realidad se trata de la enfermedad del sueño. Foreman sostiene que él fue muy explícito con el esposo cuando le preguntó si la había engañado, le dijo que cualquier mentira sobre el tema podría ser fatal.
El doctor House entra a la habitación de Elyse, donde también se encontraba su esposo, y le hace unos chequeos.
Esposo: ¿Quién es usted?
House: Soy el doctor House, su esposa tiene tripanosomiasis humana africana, la enfermedad del sueño.
E: ¿No es toleramia, un virus, un tumor, un cáncer?
H: No
E: No tuve un amante.
H: Y le creo.
E: Y confío en Elyse.
H: El tratamiento para esta enfermedad es una droga que es fatal en si misma el 10% de las veces y necesito su consentimiento antes de que la prescriba.
E: No vendría sabiendo que morirá
H: No pregunto porque los pacientes mienten, solo asumo que lo hacen. Pero ¿Porque no protegerlo? Ella no cree que importe, parece lo más fácil porque eso es lo que las personas hacen. Y si está seguro de que su esposa no tuvo nunca relaciones más que con usted, pues entonces estoy equivocado. Pero si cree que hay posibilidad de que solo por una vez, ella no fuera perfecta, un fin de semana que usted salió, una pelea que ella se fue con una amiga a una estúpida fiesta navideña, entonces permítame iniciar el tratamiento, porque si no estará muerta para mañana. ¿Confía mucho en su esposa?
E: No lo se
H: Comenzare el tratamiento.
Nuevamente en la habitación de la mujer, Chase y Foreman comienzan a darle las inyecciones para combatir esta enfermedad, mientras ella seguía encontrándose en coma. En la siguiente escena se ve a Cameron que le está dando la inyección, el esposo le pregunta para cuando debería mejorar, a lo que le contesta que es difícil decirlo, pero que es bueno que no esté peor. Él le pregunta a la médica si su mujer sabe que él está allí, a lo cual la médica le dice que ella sabe que él está siempre para ella. A esto el hombre dice que si se mejora, que significaría que ella no estuvo siempre para él. La médica le dice que solo cometió un error y el hombre le dice que hay una gran parte de él que no entiende como ella pudo hacerle eso, a lo que le pregunta si, en parte, querer que la esposa no se mejore lo hace un mal hombre, a lo que la médica le dice que sí.
Wilson le pregunta a House si diagnosticó que la mujer tenía la enfermedad del sueño por su idea de que las parejas no son fieles, a lo que House afirmó. Siguen hablando sobre la “relación” que está comenzando con una compañera de oncología. House habla con Cameron, quien estaba llorando por más que lo negó, le comentó que le había dicho al esposo que era un idiota, le cuenta que cuando ella estudiaba se casó con un hombre que, a los 6 meses falleció por cáncer de tiroides. House le marca que esa enfermedad la tenía desde que se casó con él, que estaba diagnosticada de antes y sin embargo se casaron, sabiendo que esto iba a pasar, le dice que no puede ser una buena persona sin repercusiones.
A ambos les suena el localizador y van a la habitación de la mujer, allí esta Chase y Foreman. Las condiciones de la mujer no mejoran, en eso aparece el marido. Se le acerca a la cama, le apoya sobre su brazo, le dice que no quiere que muera y se pone a llorar. La mujer despierta (sin abrir los ojos ni hablar), le pone la mano sobre la cabeza del esposo y los médicos la controlan.
Más tarde, la mujer estando despierta habla con el esposo, el agarro un bolso y se va del hospital. La medica le pregunta que hace, le pregunta si siempre fue honesta con ella, que su esposa está viva y lo ama, a lo que él le dice que la esposa lo engaño y que así no la puede amar. La mujer está en la habitación llorando y Dr. House le pregunta con quien fue que le fue infiel así le administran tratamiento al otro hombre.
En esta escena, Cameron aparece en la casa del hombre, hay un nene jugando en la entrada, al quien saluda y le pregunta dónde está su papa, mira hacia la puerta de entrada y en ese momento sale de la casa un hombre, que termina siendo el amigo de Ed, el mismo que, en la primer escena del capítulo, está trotando junto a él.
Desarrollo conceptual
Resumen
A partir del capítulo sexto de la primera temporada de la serie Doctor House llamado “El método socrático” nos proponemos justificar la ausencia de un genuino circuito de la responsabilidad subjetiva en los personajes que aparecen en escena. Para esto recortaremos dos situaciones del capítulo que nos servirán como disparadores para justificar teóricamente los motivos por los cuales decimos que no se encuentran elementos para poder ubicar un circuito de la responsabilidad subjetiva. Tomaremos como protagonistas a Luke, un joven de 15 años quien se encuentra haciéndose cargo de su madre “esquizofrénica”; y por otro lado al cirujano Bergin, quien opera a la madre de Luke, llamada Lucille. Veremos que tanto en Luke como en Bergin hay una primera acción que va más allá de lo esperado, pero que, sin embargo, no hay un propósito inconsciente que haya propiciado esa acción, por eso afirmamos que no podemos ubicar algo del orden de la responsabilidad subjetiva en estos personajes.
Trabajo
Gabriela Salomone (2006) hace una distinción entre la responsabilidad subjetiva y la responsabilidad jurídica. La responsabilidad subjetiva interpela al sujeto y se asienta en la noción de sujeto del inconsciente, interpela al sujeto más allá de las fronteras del yo, al sujeto no autónomo, es decir, que no es dueño de su voluntad e intención. En cambio, la responsabilidad jurídica está planteada en función de la noción de sujeto autónomo, la cual restringe la responsabilidad al terreno de la conciencia.
En el sexto capítulo de la primera temporada de la serie Doctor House se puede apreciar como Luke, el joven de 15 años hijo de Lucille, alimentaba a su madre de hamburguesas. Esto se evidencia cuando los dos médicos van a la casa de Lucille y abren su heladera y ven que esta se encontraba repleta de hamburguesas.
Luego, en el hospital, Luke le hace una hamburguesa para su madre, y cuando iba camino a llevársela, lo interrumpe House y le pregunta por qué le da hamburguesas a Lucille. Luke contesta que es lo único que come, entonces House le explica que las hamburguesas provocan la falta de vitamina k y eso era la causante de su enfermedad. Al enterarse de esto, Luke se angustia y House le brinda su consuelo explicándole que él hizo un gran trabajo cuidando a su madre.
Aquí podemos ubicar un tiempo uno en el que, como explica Juan Jorge Fariña, se lleva a cabo una acción, con determinados fines, entendiendo que tal iniciativa se agota en los fines u objetivos para los cuales fue concebida. En este caso, sería el hábito de Luke de alimentar a su madre con hamburguesas. Vale aclarar que él creía que eran saludables por haber atendido a sus aportes nutricionales.
Por otra parte, Fariña sostiene que el tiempo dos es aquel en el que algo extraño irrumpe y quiebra todo sentido. Hay una interpelación que el sujeto recibe a partir de indicadores que le avisan de que algo anduvo mal.
En esta situación se podría pensar un tiempo dos en la intervención de House, dando lugar a la angustia en Luke, sintiéndose algo culpable de la enfermedad de su madre. Esto hace que Luke se replantee la forma de alimentar a su madre.
Con respecto a la hipótesis clínica diremos que esta no puede ser ubicada en esta situación, ya que la distancia entre tiempo 1 y tiempo 2 se debe exclusivamente a algo del orden de la determinación, del destino, de la necesidad. Fariña afirma al respecto “Cuando en una situación rige por completo el orden de necesidad, la pregunta por la responsabilidad del sujeto carece de toda pertinencia” (p. 1).
Luke ignoraba por completo que la falta de vitamina k era lo que causaba la enfermedad, por lo tanto no podemos atribuirle responsabilidad sobre el hecho y armar un genuino circuito de la responsabilidad subjetiva.
Otro ejemplo en el cual no puede ser considerado como un genuino circuito de la responsabilidad subjetiva se da cuando Bergin, el cirujano, es convocado a realizar la cirugía a Lucille, ya que ella tenía un gran tumor.
El tumor en el hígado es de 5,8 cm y los médicos lo reducen a 4,6 cm con una inyección directa al hígado de 20 cc. de etanol, y así engañan a Bergin para que acepte llevar a cabo la cirugía. Esto es denominado por el médico que realiza la extirpación como un fraude por parte del Dr. House. En esta situación, podemos ubicar un tiempo uno en donde Bergin realiza la cirugía, pensando que la acción se agota en los fines para los que fue realizada.
El tiempo dos, afirma María Elena Domínguez (2006), es “un momento propicio para la emergencia de una singularidad que demuestre la incompletud del unirverso previo junto con la caída de los ideales que allí lo sostenían” (p. 135)
Podríamos ubicar un tiempo dos cuando Bergin descubre que había sido engañado por House, y que este había cometido un fraude. Evidentemente, la acción de Bergin fue más allá de sus objetivos previos.
Sin embargo, en este caso tampoco podríamos postular una hipótesis clínica, por ejemplo, adjudicándole un deseo inconsciente a Bergin de realizar la cirugía, ya que él fue engañado, ignoraba por completo el fraude, fue algo que no dependió de él, le vino dado, no tuvo voluntad, por eso decimos que esto es del orden de la determinación. Entonces, Por todo esto afirmamos que no podemos considerarlo como un verdadero circuito de la responsabilidad subjetiva.
Vale aclarar que Fariña sostiene que para que el tiempo dos sea genuinamente tal e interrogue verdaderamente al sujeto es necesario que la distancia entre el tiempo uno y el tiempo dos no se deba exclusivamente a azar y/o necesidad. Como ya explicamos, en ambos casos la distancia entre tiempo uno y dos se debe exclusivamente a algo del orden de la necesidad. Por lo tanto en ninguno de los dos casos quedaría verdaderamente formulado un tiempo dos.
Los dos casos son ejemplos de desresponsabilización subjetiva, en ninguno de los casos hay una verdadera responsabilidad subjetiva. Freud ubica la responsabilidad en relación a aquel propósito inconsciente que, ajenamente a la voluntad del yo, propició la acción. Si adjudicaríamos responsabilidad subjetiva a los sujetos de estos casos, caeríamos en una reducción a la responsabilidad subjetiva, que radica en asignar responsabilidad al sujeto allí donde ésta no existe.
Dejamos para lo último, la explicación de por qué elegimos el título: Yo no fui. Con este título hacemos alusión al capítulo de Los Simpsons en donde Bart tira el escenario del payaso Krusty y dice –intimidado ante la mirada del público presente- "yo no fui". Verdaderamente él no había tenido intenciones de hacerlo. Este "Yo no fui" aparece implícitamente en ambos personajes, aludiendo a lo accidental, a la falta de voluntad propia en lo ocurrido. Luke no tenía intenciones -tampoco un deseo inconsciente- de alimentar mal a su madre y causarle la enfermedad. Tampoco Bergin de cometer un ilícito en términos médicos. En ambos se puede apreciar que en sus acciones no hay responsabilidad subjetiva, sino algo del orden de la determinación. Al respecto, Juan Carlos Mosca (2004) explica que “No habiendo voluntad manifiesta de producir un efecto dado y si los hechos son consecuencia de una razón contenida en el principio de razón, no hay lugar a la responsabilidad. Si son efectos del azar, tampoco” (p. 124)
Bibliografía
Domínguez, M. E. (2006). Los carriles de la responsabilidad en el circuito de un análisis. En G. Z. Salomone, M. E. Domínguez, La transmisión de la ética: Clínica y deontología, (p. 131-144). Buenos Aires: Letra viva.
Fariña, J. J. Responsabilidad: Entre necesidad y azar. Buenos Aires: Ficha de Cátedra.
Mosca, J. C. (2004). Responsabilidad: otro nombre del sujeto. En J.J. Fariña, Ética un horizonte en quiebra (p. 113-128). Buenos Aires: Eudeba.
Salomone, G. Z. (2006). El sujeto autónomo y la responsabilidad. En G. Z. Salomone, M. E. Domínguez, La transmisión de la ética: Clínica y deontología, (p. 99-116). Buenos Aires: Letra viva.
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