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DNR / La decisión

Temporada 1 - Episodio 09

Foreman: Nuevo Sujeto Jefe (de sí mismo)


Autores: Simone, Leonardo Salvador; Villalba López, Deolinda

Palabras clave: Esclerosis Lateral Amiotrófica – Neuropatía Motora Multifocal – Granulosis de Wegener – Malformación Arteriovenosa Intradural – Orden de No Resucitación.

Síntesis

El capítulo comienza con una escena en un estudio de grabación en la cual una banda de música está esperando al trompetista John Henry Giles. Luego de eso se muestra al susodicho, de tez oscura y vestido de manera elegante, viajando en un auto, mientras mira por la ventana y habla con una mujer (que parece ser la manager). En la escena siguiente entra Giles al estudio, acompañado por la manager y un hombre que empuja su silla de ruedas. Sigue el capítulo con otra escena más en el estudio, en la cual están el trompetista Giles y la manager del lado de los instrumentos, y la banda está del lado de la consola, preparados para grabar. A los segundos de empezar a tocar, Giles comienza a errar las notas y parece ahogado; deja caer la trompeta al lado de su silla de ruedas mientras su manager se acerca corriendo para asistirlo, desabotonándole la camisa y pidiendo una ambulancia. Finalmente se muestra a Giles desmayado en la silla, sostenido en brazos por su manager, mientras la cámara se desplaza para filmar su mano que permanece tiesa.

Luego de transcurrida la introducción de la serie, se muestra una escena en el hospital en la cual aparece el Dr. Gregory House discutiendo con la directora del hospital, Lisa Cuddy, sobre el tratamiento que va a recibir el trompetista, el cual además de la parálisis de las piernas presenta un caso de neumonía; House quiere participar, interesado por la parálisis que aqueja a Giles, pero Cuddy le confirma que no puede, porque el médico personal del trompetista, Marty Hamilton, solo quiere que trabaje su equipo, los doctores Foreman, Chase y Cameron, sin incluirlo a él. Cuddy menciona que Hamilton está aplicando un tratamiento experimental contra la parálisis de Giles y por eso no quiere que participe y el caso queda en manos de Foreman.

El capítulo continúa con House y su equipo trabajando sobre el caso de Giles, con Foreman a cargo. House insiste con la cuestión de la parálisis, mientras que Foreman quiere solamente dedicarse a la neumonía. Este último le indica a House que Hamilton ya le diagnosticó a Giles una E.L.A. (Esclerosis Lateral Amiotrófica), una enfermedad que no puede tratarse y que podría pronosticar la neumonía. Pero House sigue insistiendo y le pide al resto de su equipo que le digan posibles diagnósticos sobre otras enfermedades que podría estar sufriendo Giles y que le provocaran la parálisis de las piernas. House cree que podría ser una Neuropatía Motora Multifocal y por eso propone realizar otra resonancia y aplicar inmunoglobulina.

Escena siguiente, se encuentra Foreman junto con Giles, quien está acostado en una camilla del hospital y se muestra insatisfecho con el tratamiento del doctor Hamilton. Al respecto le pregunta a Foreman: -“¿Cree que moriré aquí o que primero podré volver a casa?”, mostrando que comprende el estado terminal que le pronostica el diagnóstico de E.L.A. Foreman le propone realizar otra resonancia para poder realizar un mejor diagnóstico, y es allí que ante el descreimiento de Giles, termina nombrando a House. Entonces Giles le pide a Foreman que le diga quién cree que es mejor, si Hamilton o House, para saber quién de los dos podría darle un mejor diagnóstico y saber si realmente tiene E.L.A. o no. Ni bien Foreman le indica que todo apunta a la E.L.A., Giles se niega a realizar la resonancia y le pide que le traiga para firmar una Orden de No Resucitación (“Do Not Resuscitate”, de allí las siglas de D.N.R. que le dan nombre al capítulo), lo antes posible (ya que la E.L.A. le ocasionaría una parálisis progresiva).

En seguida se muestra otra escena en la que está House tirado en el piso escuchando discos de vinilo de Giles, hasta que entra Foreman y le indica que Giles firmó una O.N.R. House le pregunta si le dijo que podría no ser una E.L.A. a lo cual Foreman responde por la negativa.
Insistente, para probar que podría no ser E.L.A., le dice que si fuera su caso le aplicaría también inmunoglobulina, por lo cual Foreman le dice: -“Él no quiere que le hagamos nada. Ningún tratamiento.” House retruca: -“O.N.R. significa ‘no resucitar’, no ‘no tratar’. Si no haces nada, no importa quién tiene razón.” Luego sigue escuchando música y hace un chiste respecto a la firma de la O.N.R., mientras Foreman sale de la habitación.

Sigue el capítulo con Foreman caminando por los pasillos del hospital indicando a alguien por celular que se le administre la inmunoglobulina a Giles. Mientras tanto, House está en una pequeña sala escuchando a un hombre que habla sobre sus problemas de impotencia y le pide “las pastillas azules”. House le dice que no las necesita ya que en realidad su problema es ocasionado porque tiene diabetes, lo cual no le indicó a la enferma, y comienza a describirle los signos visibles relacionados con la enfermedad. Entonces le llega un mensaje de que el paciente Giles se encuentra en código azul. Luego se muestra la escena con Giles en la camilla con dificultades respiratorias, mientras que Chase y Cameron lo asisten. Foreman entra y les dice que es culpa de él por haberle administrado la inmunoglobulina. Chase propone intubarlo para que pueda respirar normalmente pero Foreman le indica que no puede ya que Giles firmó una O.N.R. Diez minutos después entra House y Foreman le dice que el paciente se encuentra así por “ellos” le administraron la inmunoglobulina. Ante las órdenes de House de salvarlo, Foreman dice que es demasiado tarde, que ya lo mataron; pero House se niega y ya que todos se muestran dubitativos de violar la O.N.R., él mismo se pone en acción y decide entubarlo. Nadie lo ayuda, pero de todas formas continúa. En seguida entra la manager de Giles que estaba de visita y House le indica que se encuentran en esa situación porque reaccionó mal ante un medicamento que le dieron, y Cameron, defendiéndolo, le dice a la manager que él acaba de salvarle la vida.

En la escena siguiente están House y su equipo discutiendo sobre el caso en su consultorio. House se sigue preguntando sobre el diagnóstico de Giles, por lo cual Foreman se muestra molesto y le recuerda la O.N.R. House intenta dejar de lado todo dilema ético sobre intubar a Giles o no, por lo cual se ve interpelado por Foreman que le dice que “No hay pregunta. ¡Es la decisión del paciente!”. House insiste y pregunta retóricamente por qué firmó la O.N.R., y le recuerda a Foreman que “firmó la O.N.R. porque no quería una muerte lenta y dolorosa ocasionada por la E.L.A.” y que “lo que pasó no tuvo nada que ver con la E.L.A.”. Foreman le reprocha que “fue la inmunoglobulina”, que fue él quien se equivoco, razón por la cual House se defiende recordándole que no es su caso, que el error es suyo. La discusión continúa hasta que finalmente Foreman sale de la habitación. Siguen hablando sobre el caso y creen que se podría tratar de otra enfermedad: Granulomatosis de Wegener, que es tratable, lo cual explica que no respondiese a la inmunoglobulina. Pasados unos segundos entra una mujer con un sobre el cual contiene una orden de restricción que no le permite a House acercarse a menos de 15 metros de Giles y se lo acusa penalmente de agresión. House les dice a Cameron y a Chase que realicen una prueba de sangre y una biopsia con el material que tienen de pruebas anteriores para verificar si se trata del nuevo diagnóstico.

En la escena siguiente, House habla con Cuddy en uno de los pasillos del hospital. Ella le dice que le va a asignar un abogado para su acusación penal y que el doctor Hamilton está llegando al hospital para desconectar a Giles. Luego, se muestra a House, junto con el abogado asignado, en una sesión de emergencia de un tribunal, solicitando que Giles permanezca conectado al respirador. El abogado de House nombra su derecho a enfrentar a su acusador (ya que había sido acusado de agresión). Detrás de House se encuentra su amigo, el doctor James Wilson, que le pregunta por qué está haciendo todo esto. House le indica que es para ganar tiempo y poder diagnosticar a Giles. Mientras tanto se pone en cuestión la validez de la O.N.R., ya que podría haber sido firmada a causa de una depresión tiroidea. House para desconcentrar al juez, interrumpe el juicio diciéndole que tal vez podría tener una afección cardíaca por la forma de sus dedos y que debería consultar a un médico.

Luego, se muestra el departamento de patologías. Cameron y Chase están trabajando con las pruebas realizadas a Giles. House llega y les dice que le administren Cytoxan, ya que podría tratarse de la enfermedad de Wegener y no pueden realizarle más pruebas al paciente. Chase le cuestiona que no se pueden hacer más tratamientos, lo cual se continúa con una pregunta de Cameron: -“¿Nos está pidiendo que arriesguemos nuestra licencia médica?”. House los mira y en la escena siguiente se muestra que se dirige a la habitación de Giles a administrarle el Cytoxan, violando la orden de restricción. Ni bien sale, aparece el doctor Hamilton, quien le dice que deberían hablar. Seguidamente, se muestra a Hamilton y House entrando en el consultorio de este último. Hamilton le dice que ya buscó que Giles no tuviera la enfermedad de Wegener y continúa: -“Hay un momento para rendirse. Voy a desconectar el respirador y John Henry morirá. Él ya lo aceptó.” Luego entra Foreman al consultorio y después de saludarse amistosamente le dice a Hamilton que lo siente, que nunca debió administrarle inmunoglobulina. Hamilton le dice que no es su culpa, quien es interrumpido por House que dice que la culpa es suya, ya que él lo sugirió. Además, le recuerda a Hamilton que no puede desconectar a Giles porque tiene una orden judicial, pero éste le contesta que todos los cargos fueron retirados. La escena termina con House diciendo que Giles “no tiene que morir”, mientras que Foreman confirma que “no es Wegener”.

El capítulo continúa con House y Wilson mirando desde fuera de la habitación de Giles cómo va a ser desconectado del respirador. House le dice a Wilson que si la enfermedad es verdaderamente Wegener, Giles morirá ni bien lo desconecten. En la habitación se encuentran Giles, su manager, Hamilton y Foreman. Luego de unos segundos de suspenso, Hamilton retira el respirador. Mientras lágrimas caen por los ojos de Giles por la inminente muerte, se observa que a pesar de haber sido desconectado, sigue respirando. Junto con la sorpresa de todos, House se da cuenta que no sufría de Wegener y admite que nuevamente se volvió a equivocar.

Se reúne el equipo nuevamente, Cameron sugiere que la parálisis del brazo puede haber sido un accidente cerebro vascular. House ordena que le realicen un organigrama. Foreman no está de acuerdo afirmando que no es paciente de ellos, a lo cual House le replica que ahora se puede acercar al paciente porque ya retiraron los cargos. Va a ver a Giles a su habitación y lo convence de averiguar qué tiene, diciéndole que si después de eso sigue con la idea de suicidarse él mismo lo iba ayudar. Giles lo trata de obsesivo y solitario, diciéndole que los dos son buenos en lo suyo y que es lo único que tienen en la vida, que no hay esposa esperando en sus casas con comida caliente. House le contesta, que por eso Dios inventó el microondas; los dos se ríen. Giles vuelve a decirle que para ellos si se les acaba su trabajo, todo se acaba. House gira para retirarse triste pero bruscamente vuelve, le retira los sueros y toma la camilla empujando a Giles hacia el pasillo. Le dice que si quiere llame a la policía, y de todas formas lo lleva a hacerle los estudios.

En la siguiente escena, Hamilton y Foreman se encuentran en un restaurant, en una conversación amistosa. El primero le pregunta si esta cómodo trabajando con House y si tiene una pareja estable; Foreman le contesta que trabaja muchas horas y que estaba saliendo con alguien pero que no era nada serio. Hamilton le pregunta si le gustaría trabajar con él, seguido de la reacción de sorpresa de Foreman. Luego, en un consultorio, Cameron y Chase están observando los estudios de Giles. Foreman entra y les comenta que Hamilton le ofreció para que vaya a trabajar con él. Chase le pregunta si es como empleado, a lo cual Foreman contesta que el ofrecimiento es como jefe, y de mejor paga. Ambos, Chase y Cameron le preguntan por qué no acepta, y ante la duda, Foreman les pregunta si ellos aceptarían. Chase le contesta que él no necesita la plata y Cameron que ella no odia tanto a House como él, por lo cual Foreman les dice que no comprende cómo están de acuerdo en el accionar de House. De repente se sorprenden de lo que ven en el estudio de Giles, descubren que tuvo un accidente cerebro vascular. En eso, Foreman comenta que House podría aprender a ser más humilde no advirtiendo que éste había ingresado al consultorio y que lo escuchó. Con caras de sorpresa, House pregunta cuál es el veredicto: Cameron le cuenta inmediatamente que hubo un émbolo en Giles y que es un coágulo el origen de la parálisis del brazo, al cual se suma Chase diciéndo que todavía se puede tratar. House les dice que procedan.

En otra escena, se muestra la habitación de Giles, donde está también su manager. Ingresa Foreman junto con Hamilton y le cuentan a Giles lo del coágulo, tratándo de convencerlo para que acepte un medicamento que ayudaría a disolverlo. Giles le pregunta cuáles son los efectos colaterales, a lo cual le contestan que hay algunos, y por eso no acepta el tratamiento. Foreman lo mira a Hamilton, quién le dice que es su derecho, pero éste no se convence y le propone una cirugía. La manager le dice que si no aceptó la medicación, cómo va a aceptar la cirugía. Giles de todas formas pregunta sobre la cirugía y Foreman le cuenta que mediante esa intervención podría volver a mover el brazo, como así también existe el riesgo de morir, pero que de todos modos él saldría ganando, ya que o se cura o muere. Giles acepta la cirugía.
Seguidamente, Giles aparece en el quirófano. Mediante una pantalla se observa el coágulo y cómo trabajan sobre ella. Cameron le pregunta varias veces a Giles como se siente y éste le contesta que está bien, salvo a lo último, que dice creer que está bien. Mientras tanto, en un consultorio están conversando House y Foreman. Discuten sobre lo que escuchó decir a Foreman de la no humildad en su trabajo y le dice que ser condescendiente como Hamilton no es ser humilde. Le pregunta si cree que Hamilton es mejor médico que él. Foreman comenta que nota diferencias de estilo entre los dos, pero que ambos son buenos médicos. House le dice que dudar de uno mismo no beneficia a nadie, si se tiene razón. Suena la alerta verde de la habitación de Giles y ambos acuden al llamado. Allí están la manager y Hamilton junto con Giles. Ingresan a la habitación Foreman y House, mientras el paciente levanta el brazo demostrando que lo puede mover. House va al teléfono y lo levanta, indicando que anda, para luego decir que con un llamado bastaba, que no era necesaria la alerta. Después, sin pensarlo, toca la pierna de Giles diciéndole que no se ponga contento por su mejoría, razón por la cual Giles le dice que le toco la pierna. House, irónico, contesta que si quiere que lo demande. Giles dice que no es eso, sino que tuvo la sensación del contacto en su pierna, por lo cual todos quedan sorprendidos.

En un consultorio del equipo, House les dice a Chase y Cameron que busquen el por qué de la mejoría. Luego aparecen en otra escena, caminando por el pasillo Foreman y Hamilton, hablando sobre la mejoría del paciente. Hamilton comenta que los medicamentos mejoraron el E.L.A., diciendo que ahora House va creer que su medicamento está resultando. Foreman asiente. Mientras tanto, House junta a todo su equipo y les pide que suspendan todos los medicamentos para administrarlos uno por uno y ver cuál de ellos le está haciendo bien. Cameron le reprocha que podría empeorar, pero de todos modos House decide correr ese riesgo. Su equipo no está muy de acuerdo.
En la escena siguiente, en un consultorio, House está viendo un programa de televisión junto con Wilson. Entra Hamilton diciéndole que necesita hablar con él. House le pide que espere a que llegue la publicidad y que salude a su amigo Jimmy, burlándose de la forma de Hamilton de llamar a los doctores. Hablan allí mismo, delante de Wilson: Hamilton quiere saber qué medicamentos le está suministrando a Giles. House no quiere contarle y le dice que si se entera porque Foreman le cuenta, le iba hacer cumplir a éste su contrato de dos años. Al escuchar esto, Wilson le pregunta si Foreman se quiere ir. Hamilton en realidad quiere saber qué medicamento le suspendió. House se sorprende por esto, diciéndole que él no es ningún idiota, y por eso le pregunta cuál es el motivo para saber qué medicamentos se suspendieron.

Luego se muestra la habitación de Giles: House y Foreman descubren que el paciente empeoró, perdió la sensibilidad de las piernas y está como dormido. House le comenta a Foreman, que el paciente está donde empezó y que lo bueno es que Hamilton quedó mal. Foreman le contesta que no se trata de que él pierda o gane, por lo cual House le retruca que es Hamilton el que está perdiendo. Posteriormente, se muestra un consultorio, en donde House le dice a su equipo que le den esteroides a Giles por 24 horas y que le hagan otra resonancia magnética, porque algo seguramente cambió. Además, le dice a Foreman que tienen que hablar. Cameron y Chase le realizan el estudio a Giles mientras comentan sobre la relación de House y Foreman. Creen que si no lo deja ir con Hamilton seria reconocer que lo necesita y que eso no sería propio de House. De pronto la charla se interrumpe porque descubren un cambio en el estudio de Giles. En otra parte del hospital están charlando Foreman y House. Este último dice que Hamilton es un gran médico y le pregunta a Foreman si lo consideraba mejor que él; que si así era, debería aceptar su oferta de trabajo, de lo contrario que acepte 2 o 3 invitaciones a almuerzos de nostalgia y que agradezca por la cortesía. Foreman contesta que no es tan sencillo y le pregunta si debe ignorar las burlas y los abusos de él. House le pregunta cómo es que abusa de él, a lo cual Foreman contesta que de miles de maneras cuando comete errores. House le responde que eso no es burlarse, sino hacerlo responsable. Foreman le reprocha que Hamilton perdona, razón por la cual House le dice que no culpar no significa perdonar, ya que delante de él le había dicho que no era su culpa, cuando en realidad sí lo había sido, ya que se arriesgó y eso le parece que fue fabuloso. House le afirma la diferencia entre él y Hamilton: -“Él cree que haces tu trabajo y que pasa lo que tiene que pasar. Yo creo que lo que hago y lo que tú haces importa.” Al instante, entran Cameron y Chase y les cuentan lo que vieron en la resonancia. Luego, los cuatro del equipo de House miran y comparan los estudios, el actual con el anterior, y observan algo que antes no se veía: una malformación arteriovenosa intradural, presionando la espina, provocando la parálisis. Foreman se pregunta, cómo Hamilton no lo vio, a lo que House le dice que ellos tampoco lo vieron, y que él cree que las esteroides no lo dejaban ver en el anterior estudio.

En la siguiente escena, se muestra un quirófano en donde se lo ve a Giles y al equipo de médicos trabajando sobre su columna. Luego parece como si hubiera pasado el tiempo y se puede ver a Giles en una sesión de rehabilitación para las piernas. El capítulo continúa con una escena en la que se abre el ascensor y sale Giles caminando con un bastón mientras se encuentra con House. Giles le cuenta que le dieron el alta y le agradece que no haya abandonado su caso. House le responde que no podía hacer otra cosa. Giles le regala el estuche que estaba llevando, que parece contener una trompeta. Finalmente le pregunta a House cuántas pastillas toma. Éste le contesta que “duele mucho”, a lo cual Giles le replica que sí, “a todos les duele”. Salen los dos del hospital, caminando cada uno con su bastón, que según House, Giles dejará pronto. En eso pasa Foreman caminando por un pasillo del hospital y House antes de irse lo saluda diciéndole “hasta mañana Eric”. Foreman lo mira, se sonríe y sigue caminando. El capítulo finaliza.

Desarrollo conceptual

Resumen

Nuestro trabajo comienza con una enumeración cronológica (según van ocurriendo los hechos durante el episodio) de las decisiones tomadas por los personajes principales; entre ellos incluimos a Foreman, House y Giles. El análisis del presente trabajo se centra en el personaje de Foreman y en una decisión singular que toma, la cual abrirá el circuito de la responsabilidad.

Luego de justificar nuestra elección de personaje y de realizar el recorte situacional en una de sus decisiones procedimos a elaborar el circuito de la responsabilidad subjetiva. Comenzamos describiendo las distintas escenas que consideramos interpelan al personaje y por eso constituyen nuestro Tiempo 2 en el circuito. Posteriormente, una vez definido también el Tiempo 1, pasamos a pensar una hipótesis clínica tentativa, que dé cuenta del pasaje de un tiempo a otro. Finalmente, ensayamos un posible Tiempo 3 de resignificación, articulado con la hipótesis clínica, anteriormente explicitada.

A lo largo del recorrido del trabajo, pretendimos realizar una articulación conceptual con la teoría propuesta por la cátedra, incluyendo conceptos tales como: la diferencia entre decisión, elección y opción; las categorías lógico-matemáticas de necesidad y azar; el circuito de la responsabilidad subjetiva y sus tiempos lógicos; las figuras de la culpa y la desresponsabilización; el efecto particularista; la víctima como marca; la instrumentalización neurótica; responsabilidad subjetiva en contraste con la responsabilidad jurídica; y las categorías lógicas de universal-singular y particular.

A grandes rasgos y sin resultar exhaustivos, podríamos realizar un recorte y decir que las decisiones (en sentido amplio) que se presentan a lo largo del capítulo son las que se describen a continuación. En principio, podemos ubicar la decisión de Foreman de dedicarse solo a la neumonía, mientras que House insiste en trabajar sobre la parálisis. Posteriormente, ubicamos la firma de la Orden de No Resucitación por parte de Giles, ya que Foreman le dice que el diagnóstico de E.L.A., realizado por su médico de cabecera, Hamilton, es bastante certero. Luego, podemos pensar en la proposición de House a Foreman para administrar inmunoglobulina. Destacamos principalmente la administración a Giles de la inmunoglobulina por parte de Foreman. También está la intubación de Giles por parte de House, luego del código azul, lo cual es también una violación de la O.N.R. Los cargos y la orden de restricción que levanta Foreman en contra de House, en concordancia con Giles y su manager (que no se muestra explícitamente, pero el capítulo lo da a entender ya que la noticia le llega a House ni bien Foreman sale de escena). Seguidamente, la desconexión del respirador de Giles por parte de Hamilton. En concordancia aparece la sesión de emergencia del tribunal que pide House para ganar más tiempo y poder lograr un diagnóstico. Luego de retirados los cargos, la administración de Cytoxan por parte de House a Giles y el momento en que lo saca de la habitación para seguir realizándole estudios en contra de su voluntad. Otra decisión recortada es el ofrecimiento de empleo de Hamilton a Foreman. Después, la cirugía que Foreman le propone a Giles para tratar el coágulo cerebral. Posteriormente, la quita de medicamentos por parte de House para ver cuál de todos es el que ocasionó la mejoría en Giles. La operación que realiza el equipo de House y que termina curando a Giles. Y finalmente, podríamos considerar el rechazo del empleo que Hamilton le ofrece a Foreman (si bien esta última decisión no se ve durante el capítulo, se muestra implícitamente, ya que Foreman sigue trabajando en el equipo de House, en la misma clínica).

La decisión que tomamos para analizar el recorte situacional y luego establecer el circuito de la responsabilidad es la realizada por Foreman cuando, siguiendo la proposición de House, le administra inmunoglobulina a Giles. Ubicamos a esta decisión como una grieta entre la necesidad y el azar: respecto de la primera categoría lógico-matemática, necesariamente la administración de un medicamento va a generar cambios en el organismo del paciente. Por otro lado, podríamos considerar como una cuestión de necesidad el hecho de que Hamilton, el médico de cabecera de Giles, con quien Foreman realizó una residencia, lo elija a este para que se encargue de su paciente. Ahora bien, en cuanto al azar podemos decir varias cosas: es azaroso que Giles presente esa enfermedad (por lo menos en un principio es azarosa, porque según lo presentado en el capítulo es inanticipable), como así también es cuestión del azar que su médico de cabecera sea Hamilton. Además, podríamos considerar azaroso el hecho de que justo enfermara de neumonía en la ciudad y en la clínica en donde trabaja Foreman.

Tomamos al personaje de Foreman ya que es el que nos parece que resulta más interpelado durante todo el capítulo y en el cual notamos un cambio notable en su posición subjetiva. En este caso, se trata de una decisión propiamente dicha, distinta de una opción o de una elección, ya que la acción emprendida por Foreman va más allá de administrar o no administrar el medicamento (con lo cual sería una opción, de combinación binaria), como así también es más que una ponderación de los posibles diagnósticos y de los medicamentos a emplear (según lo cual estaríamos hablando de una elección, con grados de libertad más amplios, pero en donde hay un universo de posibilidades restringido). Por lo tanto, consideramos a este acto una decisión en sentido fuerte, ya que es una acción que va en contra del universo previo de Foreman, aquel según el cual tenía pensado abocarse a curar solamente la neumonía (sin ir en contra del diagnóstico de Hamilton), y que termina interpelándolo y abriendo el circuito de la responsabilidad subjetiva.

Entonces, para empezar, ubicamos el Tiempo 2 en el accionar de Foreman, que es lógicamente anterior al Tiempo 1. La interpelación subjetiva del personaje se puede observar a lo largo de casi todo el capítulo. Una primer escena que nos anoticia de esto es la del código azul de Giles, en la cual se encuentra inconsciente y con dificultades para respirar. Foreman sabe que la única manera de salvarlo es intubarlo, pero no lo hace y también se lo prohibe a Cameron y Chase, ya que estarían yendo en contra de la O.N.R. Luego de que House intuba a Giles y lo salva, aparece en Foreman una de las figuras de la culpa, como contracara de la responsabilidad: cuando dice que es culpa de “ellos” que el paciente se encuentre así, que “ellos” lo mataron, podríamos pensar que esta generalización de la culpa implica, por una parte, una respuesta culpógena del yo de Foreman y, por otra, una proyección de la culpa al atribuirla al resto del equipo. En seguida, en escena siguiente, Foreman presenta un cambio en su posición; ya no dice que es culpable por haber administrado el medicamento, sino que dice que la culpa es de House, ya que él lo propuso. En este caso, observamos nuevamente la proyección de la culpa, pero ahora en una sola persona (en House), conjuntamente con la negación de su propia culpa, lo cual es otra forma de desresponsabilización. House le recuerda que el error es suyo ya que es su caso, y Foreman responde levantando cargos y una orden de restricción en contra de House, lo cual podríamos ubicar como un efecto particularista que impide el despliegue de las categorías de universal-singular, en pos de lo particular y de un marco normativo (lo cual se puede pensar también como el quiebre del horizonte de la ética). Lo consideramos un particularismo, porque a partir de esta orden de restricción, no tiene que considerar cabalmente por qué Giles firma la O.N.R., y defiende ese documento con otro documento más; es decir, pretende darle a la O.N.R., de rasgo particular, la condición de universal, reemplazando la decisión de su paciente y su propia responsabilidad como sujeto por un elemento del campo jurídico.
Otra escena que podríamos incluir en el Tiempo 2, de interpelación, es aquella en la cual Foreman le pide disculpas a Hamilton por haber administrado el medicamento y dice que fue su culpa, nuevamente una respuesta culpógena; Hamilton “lo perdona” por su acción, lo cual es una forma de ahondar en la desresponsabilización de Foreman, quien se ubica en una posición cómoda de esta manera. Finalmente, también podríamos ubicar como momento de interpelación la escena en que House y Foreman discuten, ya que éste último se muestra enojado y le reprocha a House el culpabilizarlo por la administración de la inmunoglobulina, y que además de no perdonarlo, no lo valora y abusa de él, con lo cual podríamos pensar que responde a la interpelación ubicándose en cierta forma en el lugar de la víctima, respondiendo desde la marca, impidiendo la irrupción de la posición subjetiva.

Entonces, todas estas interpelaciones ubican como Tiempo 1 la escena de la administración de la inmunoglobulina, la cual genera efectos disonantes en el sujeto Foreman. Para pensar en una posible relación entre los Tiempos 2 y el Tiempo 1, que justifique el acto en un principio y las interpelaciones posteriores, suponemos como hipótesis clínica tentativa que Foreman presenta un conflicto en su superyó (junto con un avasallamiento del yo, al decir de Freud). Esto lo observamos, ya que durante todo el capítulo se encuentran confrontados dos de sus grandes referentes: los doctores Hamilton, con quien realizó la residencia, y House, con quien se encuentra trabajando actualmente bajo su coordinación (todo esto, transferencia mediante, claro está). Este accionar superyoico sobre Foreman se puede observar en las cosas que hace y dice el personaje. Al principio se niega a ir en contra del diagnóstico de Hamilton; luego Giles lo confronta directamente con el problema cuando le pregunta cuál de los dos doctores es mejor; seguidamente Foreman contradice a Hamilton para hacer lo que le propuso House. Así hasta que llega la escena del cógido azul, en donde se quiebra el mundo particular del personaje y advienen las figuras de la culpa para taponar, intentando sostener su yo y su posición subjetiva en un elemento particular del campo normativo, la O.N.R.

Tanto en este momento como en las otras interpelaciones podríamos pensar que Foreman busca la aprobación y el perdón permanente por parte de sus referentes, como si el superyó estuviera impidiendo la emergencia de singularidad y demostrando asimismo la incompletud del universo. También podríamos pensar esto en términos de instrumentalización, tal como dice Caligari, ya que podríamos suponer en Foreman una constitución neurótica en donde el saber paterno está supuesto, y por eso mismo busca la aprobación constante en Otro (Otro superyoico en este caso) para superar la incertidumbre, reduciendo la propia subjetividad y “siendo instrumento” de aquellos quienes se ubican jerárquicamente por encima de él.

Para finalizar, nosotros creemos que podríamos ubicar un Tiempo 3, de resignificación del Tiempo 1 en este circuito de la responsabilidad. Para arribar a esta conclusión nos basamos en dos opciones realizadas por el personaje de Foreman y en dos diálogos que mantiene con House. Respecto de los diálogos, ubicamos primero, puntualmente, la frase que House le dice a Foreman: “O.N.R. significa ‘no resucitar’, no ‘no tratar’. Si no haces nada, no importa quién tiene razón”. Esto va en contradicción con la posición de Foreman quien no quiere realizar ningún tratamiento (ya que responde desde la responsabilidad jurídica, en función de la O.N.R., elemento particular); no obstante, esta frase comienza a mostrarle la incompletud de su universo ya que posteriormente realiza la acción del Tiempo 1. Luego, del segundo diálogo, encontramos como crucial otra frase de House, cuando muestra su diferencia con Hamilton: “Él cree que haces tu trabajo y que pasa lo que tiene que pasar. Yo creo que lo que hago y lo que tú haces importa”. Esta frase, suponemos, anoticia a Foreman de su propia posición subjetiva y de su responsabilidad; como sujeto de la renuncia se ubica como aquel que debe renunciar a mantenerse en las marcas que el superyó le brinda, para empezar a hacer sus propios diagnósticos y administrar medicamentos, no en nombre de un equipo o de alguno de sus referentes, sino por sí mismo.

Por otro lado, destacamos las opciones realizadas por Foreman, que suplementan el universo previo, dando lugar a la singularidad del personaje y a su nueva posición subjetiva. Una de ellas que se muestra casi en la mitad del capítulo es cuando le propone la cirugía a Giles para tratar su coágulo cerebral. Consideramos que es una opción, ya que ante la negativa de Giles de recibir un medicamento, Foreman puede optar por proponer o no proponer la cirugía. El hecho de que opte por proponerla implica un cambio en la posición del sujeto, porque es una propuesta original del personaje; no es ni una proposición de House, ni tampoco está en relación con el diagnóstico de Hamilton, es algo propio de Foreman. Asimismo, consideramos a esta opción un acto ético, ya que, apoyado en lo particular de la O.N.R., considera solemnemente la decisión de su paciente y su deseo de “curarse o morir”.

La segunda opción, también binaria, es aquella según la cual Foreman puede optar por ir a trabajar con Hamilton o quedarse trabajando con House; el hecho de que se quede trabajando con House consideramos que implica un cambio radical del sujeto, que ya no es el mismo del Tiempo 1. Este nuevo sujeto de la renuncia, si bien podría seguir viendo a House como un referente importante de su superyó, sabe que éste lo va a hacer culpable y responsable por las acciones que realice, en contra de ir con Hamilton, quien sí lo perdona y lo desresponsabiliza de sus acciones.

Referencias

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NOTAS